Anima a tu gato a hidratarse en verano

• El tipo de bebedero tiene su importancia

• Ubicación

• Prueba con distintos tipos de agua 

• Otros consejos

Animar a tu gato a que beba más suele ser una buena idea, sobre todo si padece alguna de estas dos patologías:

Gatos con enfermedad renal

Estos gatos son más propensos a deshidratarse, lo que puede empeorar su enfermedad renal.

Gatos con cistitis idiopática felina (FIC)

Producir mayores volúmenes de orina más diluida ayuda a prevenir recaídas de los síntomas.

Pero, especialmente con las altas temperaturas, siempre es bueno que tenga agua a su alcance y animarlo a consumirla.

El tipo de bebedero tiene su importancia

Elige un bebedero en el que tu gato quiera beber

• Una buena idea es que experimentes con distintos tipos de recipientes hasta encontrar uno que le guste. En general, los gatos prefieren los cuencos de vidrio, metal o cerámica en lugar de los de plástico. También prefieren un cuenco amplio y poco profundo para no tener que meter la cabeza en el recipiente para beber, ya que no les gusta que sus bigotes toquen el costado del bebedero o el comedero.
• Algunos gatos prefieren beber de vasos (elige uno irrompible si lo colocas en un lugar alto). Llena el cuenco de agua hasta el borde, les gusta beber de un recipiente lleno.
• Es conveniente tener varios bebederos para que tu gato siempre tenga uno a mano.
• Por ejemplo, si tienes una casa con varias plantas, coloca uno en cada planta para que no tenga que subir o bajar escaleras para encontrar agua.

Ubicación

Elige un buen lugar para los bebederos

• Aléjalos del comedero: a los gatos les gusta beber lejos de su comida.
• Evita los cuencos dobles (un lado para agua y otro para comida).
• Tu gato beberá más si tiene comida y agua en habitaciones separadas.
• Colócalo en un lugar tranquilo, lejos de puertas de mucho uso o lugares especialmente concurridos.

Otras fuentes de agua

Considera hacerte con una fuente de agua corriente, ya que a algunos gatos les gusta beber de agua en movimiento

• Fuentes de agua eléctricas.
• Otras opciones:
• Un grifo goteando.
• Una bandeja de ducha o bañera con una pequeña cantidad de agua.
• Colocar una pelota de ping pong dentro de un cuenco de gran diámetro lleno de agua; a algunos gatos les gusta jugar y este truco puede animarlos a beber, además de crear algo de movimiento en el agua, otra cosa que les entusiasma.

Prueba con distintos tipos de agua 

Prueba a ofrecerle distintos tipos de agua para ver si tu gato tiene preferencia por alguna. A muchos gatos no les gusta el agua con alto contenido de flúor.

Prueba con:

• Agua del grifo (siempre que sea segura para el consumo humano).
• Agua de lluvia recogida, por ejemplo, de recipientes colocados en tu jardín. A muchos gatos les gusta beber de charcos y otras fuentes de agua en el jardín si se les da la opción.
• Agua mineral.

Otros líquidos para probar

• Aguas sobrantes de cocinar pollo o pescado al vapor.
• Líquido de una lata de atún rebajado con agua.
• Gambas, pescado o carne en el agua para crear una especie de sopa o caldo.

Líquidos que mejot evitar

• Líquidos salados como el agua de salmuera.
• Leche:
• Sobre todo si tu gato sufre enfermedad renal, ya que contiene altas cantidades de fósforo que no son buenas para ellos.
• La leche de vaca no puede ser completamente digerida por los gatos, por lo que puede causar diarrea.
• Cualquier cosa que contenga cebolla o polvo de cebolla, como caldos. Las cebollas son venenosas para los gatos.

Otros consejos

• El agua y otros líquidos a temperatura ambiente siempre que sea posible (el sabor se reduce en líquidos fríos).
• Cambia a una dieta húmeda en lugar de una dieta seca.
• Consulta con tu veterinario antes de cambiar la dieta de tu gato.
• Agregar agua adicional al alimento húmedo también puede ayudar a aumentar la ingesta de líquido.
• A algunos gatos les gusta comer comida que se asemeja a una sopa (añade el agua a temperatura ambiente en lugar de agua fría).
• Si tu gato solo come comida seca, prueba a añadir agua a su comida.
• Sé persistente.
• Realiza cambios de manera gradual: a los gatos no les gustan los cambios bruscos en su comida o agua.